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La idea de inversión tiene su origen en la antigüedad, en Mesopotamia, en el cuarto milenio AC. En aquel tiempo el activo principal de interés era la tierra. La única gente que podía permitirse comprar tierra eran los ricos o en otras palabras el élite. La inversión era una parte tan importante en la vida de la sociedad que fue incluida en el famoso Código de Hammurabi que es uno de los documentos legales más viejos preservados en el mundo. Según el Código la tierra debía utilizarse como fianza de la inversión.
Hablemos sobre eventos más recientes
Avanzamos rápidamente hasta el siglo XVII cuando el mundo vio su primero mercado bursátil abriendo sus puertas – la Bolsa de Ámsterdam. Aunque los historiadores siguen debatiendo si ésta fue realmente la primera, ella era definitivamente la primera en su dimensión y obtuvo suficiente publicidad para ser ampliamente recocida como institución. El mercado bursátil fue creado como un esfuerzo de conectar los propietarios de negocios y los inversores y estandarizar la inversión, haciéndola a la vez un proceso más transparente y accesible. En aquel momento fueron introducidos también los conceptos como liquidez, valor divulgado y la distribución libre del precio.
La revolución industrial – nueva época de la inversión
Hace más de un siglo el mundo entró en la fase de la revolución industrial. Este período tuvo sobre la inversión el impacto tal vez más grande comparado con todos los otros eventos en la historia de la humanidad. El mundo industrial introdujo el empleo permanente y los salarios fijos. De ese modo la gente empezó a tener dinero sobrante que podían ahorrar cada mes. En el mismo tiempo también necesitaban un lugar para preservar sus fondos personales y un método de administrarlo. Así nació la actividad bancaria. Los fondos libres se podían ahorrar y multiplicar para el futuro. De esta manera originaron los fondos de pensiones. Con tantos cambios a la vez la escena de las inversiones obviamente cambió para siempre: más gente podía permitirse ser participar en ella parte y se les proporcionó un método fácil de acumular y administrar sus ganancias.
La época digital
Estamos en el borde de otra transformación. De hecho, sería más realístico decir que esta transformación ya ha empezado con el nacimiento de FinTech. A pesar de que los mercados bursátiles y los bancos han hecho el juego de inversión mucho más fácil ellos siguen teniendo sus propias imperfecciones relacionadas principalmente con la burocracia y falta de control por parte del usuario final. Afortunadamente el sector tecnológico tiene los medios para vencer a estas desventajas digitalizándolo y simplificándolo todo.
Hasta el nuevo milenio la inversión en el mercado bursátil se lograba a través de un agente intermediario: para acceder al mercado y comprar títulos y acciones la gente tenía que trabajar con corredores de bolsa. La época del DotCom nos proporcionó el internet comercial y plataformas fáciles para el usuario que nos ayudan a seguir nosotros mismos el mercado financiero, tomar decisiones informadas e invertir nuestro dinero enseguida. Los instrumentos disponibles alguna vez son suficientemente inteligentes para hacer una gran parte del trabajo en vez de Usted. Esto bajó también la curva de aprendizaje para los inversores nuevos.
El modelo nuevo
La revolución tecnológica formó nuevos modelos de inversión y activos que no existía antes, como la inversión en préstamos interpares (P2P). Iuvo es una plataforma de préstamos interpares (P2P) que le permite invertir en préstamos y aprovecharse del interés y de las tarifas aplicables. Usted no necesita saber nada aparte de la terminología crediticia general y el perfil de los prestatarios (que está amablemente rellenado por nuestros originadores de préstamos). Esto le presta el poder de empezar a invertir inmediatamente. En el mismo tiempo Usted no necesita a preocuparse por la posibilidad de pérdidas repentinas porque está protegido por la garantía de recompra.
Conclusión
Soluciones como iuvo ayudan a los inversores apreciar lo canto el mundo se ha desarrollado en los últimos siglos. La inversión ha sido una parte de la cultura humana tan largo tiempo pero no había sufrido cambios drásticos hasta los años 1600. ¿Quién sabe, que nos llevara el día de mañana teniendo en cuenta los recientes saltos gigantes?
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